Después de quemar ocho palos verdes en un delantero que rinde menos que un calefactor en el Sahara, Miguel Borja huye a México como agente libre tras coquetear con la vereda de enfrente y dejar a Núñez con un agujero en el pecho y en la billetera.
Miguel Borja finalizó su contrato con River el 31 de diciembre de 2025 y se marchó regalado al Cruz Azul, cerrando un ciclo nefasto donde se cansó de errar penales clave y de caminar la cancha en los partidos que queman.
El colombiano, que llegó con aires de redentor, terminó siendo el «ídolo con pies de barro» que le regaló un campeonato al máximo rival y arruinó la clasificación a la Libertadores 2026 al pifiar un penal contra Gimnasia.
«No fue un año bueno en lo personal y lo acepto, soy el primero en darme fuerte», confesó el delantero con una autocrítica tan profunda como tardía, mientras los hinchas en TikTok lo bautizaban como el «burro» más caro de la historia.
La indignación total estalló cuando se filtró que el «Colibrí» se ofreció a Boca, demostrando que su amor por la banda roja era tan volátil como su puntería en los clásicos, antes de elegir el exilio en la liga mexicana.
Marcelo Gallardo, con la paciencia agotada de un gladiador harto de cargar heridos, le comunicó personalmente que no le renovaría el contrato, dándole el empujoncito final hacia la puerta de atrás del Monumental.
Incluso viejas glorias como Óscar Córdoba salieron a pegarle, calificando su estadía en River como insostenible, mientras el club se queda mirando cómo 8 millones de dólares se evaporan sin dejar un solo peso de reventa.
Atrás quedan 62 goles que solo sirven para la estadística fría, porque en el corazón del hincha solo queda el recuerdo de un jugador al que la camiseta le quedó más grande que un sobretodo de tres talles más.
Estado de la Liquidación
| Detalle | Datos del «Negocio» |
| Costo de compra | 8.000.000 USD (tirados a la basura) |
| Precio de salida | 0 USD (Libre al Cruz Azul) |
| Logro 2025 | Fuera de la Libertadores por un penal errado |
Próximo destino del descarte: Borja aterrizará en México entre el 26 y 28 de diciembre para sumarse a la «Máquina Cementera», mientras que River deberá rearmar su delantera para la Sudamericana 2026, rezando para que el próximo 9 tenga un poco más de sangre y menos ganas de cruzar el charco a La Boca.
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