El amistoso entre Independiente y Defensor Sporting, disputado en el estadio Luis Franzini de Montevideo, se vio empañado por graves incidentes protagonizados por dos facciones de la barra brava del club argentino. Los grupos conocidos como «Los Dueños de Avellaneda» y «La Gloriosa Banda de Independiente» se enfrentaron en las inmediaciones y dentro del estadio, arrojándose piedras y botellas. La policía uruguaya intervino utilizando balas de goma y gases lacrimógenos para dispersar a los violentos.
Estos disturbios obligaron a retrasar el inicio del partido, previsto para las 22:00 horas, comenzando finalmente pasadas las 22:40. A pesar de la tensión, el encuentro se llevó a cabo y culminó con una victoria de Independiente por 5-2 sobre Defensor Sporting.
Este episodio refleja la persistente problemática de la violencia en el fútbol argentino, que trasciende fronteras y afecta la imagen del deporte en la región. Las autoridades locales y deportivas deberán tomar medidas para prevenir futuros incidentes y garantizar la seguridad en los estadios.