Por la segunda jornada del Torneo Final, Boca igualó sin goles con Tigre en Victoria. Los xeneizes sacaron el positivo una solidez defensiva que le permitió, al menos en este partido, no recibir goles. Tigre, hizo su negocio en casa, continúa engrosando su promedio y quiere dar batalla en el campeonato.
Un partido para el sueño, un plomazo, vivimos este domingo por la tarde en la ciudad de Victoria, provincia de Buenos Aires, ente el local Tigre y un Boca Jrs. lleno de cambios que buscaba cambiar la mala pata que tuvo contra Toluca hace unos días por la Libertadores.
Boca, quien relegó a Cellay y le dio la chance al uruguayo Albín por la derecha, sin el tanque Silva en el ataque, jugó definitivamente mal ante un Tigre, que dentro de sus limitaciones, hizo su negocio.
En el primer tiempo Paul Fernández intentó hacer algo para el equipo xeneize pero nada más. El burrito Martínez es un jugador diferente, lleno de ideas y muy hábil, pero le falta complementos, jugadores que colaboren con él y le permitan explotar en la cancha.
Bianchi mandó al campo a Ervitti pero lo hizo al minuto 90′, por lo tanto, los 5′ de descuento que adicionó el árbitro de poco le sirvieron al jugador.
Los xeneizes, sufrieron en la primera jornada para superar de atrás a Quilmes, donde su defensa dio pena, al menos, en esta jornada no pasaron zozobra y mal de muchos, consuelo de tontos: no recibieron goles.
Boca suma 4 unidades y Bianchi tendrá que mover varias piezas y trabajar duro para que sus jugadores entiendan su sistema de juego.
Daniela Maruti
@lostribuneros