Un partidazo nos regalaron el Bayern Munich y el Borussia Dortmund por la final de la Champions League, jugada en la capital de Gran Bretaña. El estadio de Wembley estaba a pleno, las graderías decoradas con los colores de ambas escuadras. Robben la mandó a guardar sobre la hora, cuando todos nos preparábamos para la prórroga.
El partido comenzó con un Borussia lleno de bríos que entró a dominar y pujó por abrir el marcador desde el vamos; Bayern esperaba en su campo, era ordenado y trataba de salir de contra aunque la ordenada y férrea defensa adversaria no los dejaba ni llegar al área.
Lewandowski y compañía intentaron abrir el marcador desde el vamos, los bávaros resistían en perfecto orden y su notable arquero Neuer hizo un par de defensas para la foto.
Ambos equipos se estudiaban, parecía un juego de ajedrez porque todo era disciplina y entrega, por momentos el partido se puso frío, dado el orden y el respeto por táctico.
Bayern aprovechó un par de “agujeros” de la defensa del elenco de Dortmund; Robben tuvo tres oportunidades claras y no las pudo concretar. Los rivales salían a toda velocidad y eran mejores aunque nada contundentes.
En el complemento los bávaros entraron decididos a ganar; Bayern fue para adelante, dominó al rival y lo puso contra su arco. Robben entró al área a toda velocidad, se llevó la marca de varios adversarios y dentro del área chica le dio un pase notable a Madzukic, quien la mandó al fondo del arco a los 60’.
Nada estaba dicho, porque el Dortmund no se entregaba, por el contrario, fue herido en su orgullo y como un león herido fue a buscar el empate.
Solo 8’ estuvo arriba en el marcador el Bayern; Dante, el zaguero brasileño, le puso una plancha a un rival y el referí no dudó en sancionar penal. Gundogan se encargó de ejecutar la pena máxima, y no le temblaron las piernas a la hora de definir: Gol y 1-1.
Bayern frotó la lámpara, cuando parecía que se iba a poner 2-1, una pelota que estaba por traspasar la línea fue desviada, ahogando el gol.
Pasó de todo, hubo chances para uno y otro, los dos jugaban a “cara de perro”, como diríamos en el barrio.
El partido era de ida y vuelta, hasta que a falta de 10’ para el final cayó en un bache; pintaba empate y ambos parecían acomodarse en el mediocampo, reservando energías para una supuesta prórroga.
Robben tomó un balón y al mejor estilo de un jugador de fútbol de salón, pisó una pelota en el área chica, engañó a la defesa y marcó su gol. El gol de su vida.
Poco tiempo le quedó a un desconcertado Borussia Dortmund, quien casi ni tuvo tiempo de luchar porque el equipo bávaro estaba enchufado y dispuesto a ganarlo ahí mismo.
Pitazo final y a festejar.
Bayern ganó su quinta Champions y deja por tierra el mal sabor de boca de la temporada pasada, donde cayeron con el Chelsea.
Los bávaros participarán del Mundial de Clubes Marruecos 2013 por Europa.
Borussia Dortmund: Weidenfeller; Piszcek, Subotic, Hummels, Schmelzer; Bender, Gündogan; Blaszcykowski, Reus, Grosskreutz; y Lewandowski. DT: Jurgen Klopp.
Bayern Munich: Neuer; Lahm, Boateng, Dante, Alaba; Javi Martínez, Schweinsteiger; Robben, Müller, Ribery; y Mandzukic. DT: Jupp Heynckes.
Goles en el segundo tiempo; 15m. Mandzukic (BM), 23m. Gündogan (BD), de penal; 43m. Robben (BM).
Cambios en el segundo tiempo; 46m. Luiz Gustavo por Ribéry (BM) y Schieber por Blaszczykowski (BD); 47m. Sahin por Bender (BD); 49m. Mario Gómez por Mandžukic (BM). Amonestados: Großkreutz (BD). Dante y Ribéry (BM).
Arbitro: Nicola Rizzoli (Italia)
Estadio: Wembley de Londres.
@lostribuneros