Un grupo de delincuentes de las tribunas, o barras bravas, como más le guste, agredió salvajemente a un jugador de su propio equipo Lamadrid, que milita en cuarta división del fútbol argentino. Ingresaron al lugar de entrenamiento con armas blancas y de fuego.
La violencia en el fútbol argentino es de nunca acabar. Con total impunidad, unos 15 malvivientes irrumpieron el entrenamiento del club Lamadrid para increparles a los jugadores por el mal momento deportivo por el que atraviesan. Exhibieron diversos tipos de armas, según contaron testigos al programa “Sueños de Primera”, emitido por AM 670. “Vinieron directamente a pegarnos” dijo Peralta Salinas, jugador del “Carcelero”.
Quien se llevó la peor parte fue Marcelo Burzac, quien recibió un cabezazo en su nariz, y sufrió la fractura de su tabique nasal. El propio Peralta Salinas también fue agredido, pero no tuvo heridas de la magnitud de su compañero “vineron con manoplas, armas de fuego y navajas” denunció este último.
@lostribuneros