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(Foto: Getty) El equipo catalán se metió en la final de la Champions League tras eliminar de la competición a un Bayern Munich que luchó como león herido. Barcelona perdió en Alemania pero ganó en el global. ¡Partidazo!.
Una batalla sin cuartel se dio en el campo de juego del Allianz Arena. Bayern iba por la hazaña, mientras que Barcelona por la clasificación.
Si alguien en la previa pensó que iba a tratarse de un “trámite” para el elenco catalán, se equivocó. Bayern, que debía remontar un 3-0, entró al campo con todas las ilusiones, sabiendo que su rival es netamente superior y capaz de anotar en el momento menos pensado.
Los bávaros no anduvieron con chiquitas y plantearon el juego en campo del equipo culé; presionaron y no dejaron salir al elenco español. Mehdi Benatía anotó a los 7’, abriendo las ilusiones de la multitud que colmó el estadio muniqués.
El tempranero tanto abría las esperanzas, generando un cierto desconcierto en un nervioso Barcelona. Luis Enrique, desde la banda lateral pedía cordura.
Bayern prosiguió generando chances de gol. Ter Stegen se lució bajo los tres palos, hasta sacó una pelota que se colaba en el ángulo superior derecho de su arco, cuando ya estaban 1-1.
Barça, por su lado, comenzó a serenarse. Neymar, Messi y Luis Suárez empezaron a hacer de las suyas. Aprovecharon los huecos que el adversario dejaba y de contra salían. El segundo de Bayern estaba al caer, lo que emocionalmente iba a afectar al conjunto catalán, pero, en el momento clave, la “Pulga” le puso una pelota al uruguayo Suárez, que entró al área con el balón dominado, se llevó las marcas y se la sirvió a Neymar para que defina. Iban 14’.
Los rojos entraron en un mar de depresión, lo que fue aprovechado por Barcelona; les robaron el balón y les tocaban en su cara. El equipo de Luis Enrique le “mojó” la oreja a Pep Guardiola utilizando técnicas similares a las suyas.
Neymar estaba en su día. El brasileño recibió un balón de Suárez en el área, tuvo todo el tiempo del mundo para bajarlo, acomodarse y definir. Iban 29’ y ¡adiós Bayern!
Ya los bávaros precisaban propinar una goleada aún mayor, pero ni siquiera estaban ganando. Presas del orgullo, fueron en busca del empate, al menos, querían terminar el partido con un resultado digno y no humillados. Ter Stegen seguía sacando balones imposibles. Müller y Lewandowski no bajaban la guardia y le deban trabajo al fondo rival.
Para el complemento Pedro reemplazó al charrúa Suárez, que se fue lesionado. Bayern pudo tomar el balón, pero carecía de la intensidad de la primera etapa.
La generación de juego bávara no era la misma, aunque pudieron frenar a Messi y al intratable Neymar. Lewandowski a los 59’ equilibró el marcador.
Con mucha vergüenza deportiva, en la recta final del partido, Bayern fue al frente. Aprovechó que tenía el esférico y se decidió a darlo vuelta; golear era imposible, pero al menos descontaron en el global. Müller puso las cosas 3-2 en 74’.
Para evitar clasificar humillado, Luis Enrique, puso en la cancha a Xavi, en lugar de Iniesta, y además de convertirlo en el primer jugador con 150 partidos en Champions, tomó el control de la defensa y resistieron.
Barcelona jugará su octava final por Champions League. Espera a su archirrival Real Madrid o al bravo Juventus.
La final de Berlín, que se jugará el 6 de junio, será para alquilar balcones.
Formaciones:
BAYERN MUNICH 3
Neuer; Rafinha, Boateng, Benatia y Juan Bernat; Lahm, Thiago Alcántara, Xabi Alonso y Schweinsteiger; Müller y Lewandowski. DT. Pep Guardiola.
Cambios: Rode x Lahm; Javi Martínez x Schweinsteiger; Götze x Müller
Goles: Benatia, 7’; Lewandowski, 59’; Müller, 74’.
BARCELONA 2
Ter Stegen; Dani Alves, Piqué, Mascherano y Jordi Alba; Rakitic, Busquets y Iniesta; Messi, Suárez y Neymar. DT. Luis Enrique.
Cambios: Pedro x Suárez; Mathieu x Rakitic; Xavi x Iniesta
Goles: Neymar 14’ y 29’.
Estadio: Allianz Arena, Munich.
Referí: M. Clattenburg, Inglaterra.
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