El tercer equipo más importante del fútbol paraguayo, Guaraní, despidió al arquero argentino Gaspar Servio, quien había firmado contrato hasta 2023 con el aborígen. Presa de la indignación por un torneo que estaba ganado hasta el minuto 90 cuando el ex Banfield y Dorados de Sinaloa (en épocas de Maradona) se hizo expulsar y tras la roja Cerro Porteño los igualó arrancándoles así el trofeo de las manos.
Acusado de «irresponsable» el arquero de 29 años fue prácticamente echado a patadas de la institución aurinegra. Es que iban 72 minutos cuando el referí de la contienda le había exhibido la tarjeta amarilla. Guaraní le ganaba a Cerro 2-1 y le restaba nada más que los descuentos para cerrar el trámite y dar la vuelta olímpica ante el club más popular de Paraguay.
Pero, una tontería hizo que lo expulsen del partido y tras cartón el Ciclón de Barrio Obrero los empate y le dé la vuelta olímpica en la cara; un compañero suyo estaba lesionado fuera del campo, Servio, capitán de Guaraní, decidió arrastrarlo adentro de la cancha, algo que el referí consideró que se trataba de un ardid para hacer tiempo, entonces le mostró la segunda amarilla que le valió la automática expulsión.
Indignados por la actitud los directivos del equipo que lleva la camiseta amarilla y negra en homenaje a Peñarol de Uruguay, decidieron rescindirle el contrato acusándolo de «irresponsable».