Luego de la inmerecida eliminación de su Mundial Sub 20 (que no iba a organizar), Argentina continúa un verdadero rosario de frustraciones en la categoría, si bien es más relevante que surjan talentos de base del futuro de la selección mayor. Pero como los argentinos queremos ganar todo, es una seguidilla frustrante que contrasta clarísimo con los seis títulos previos al comienzo de la negra racha. Es que desde aquel golazo de Mauro Zárate a República Checa y el título en Canadá 2007 con los goles de Sergio Agüero, la albiceleste no ganó nunca más. Peor aún, desde ese momento no apareció entre siquiera los cuatro mejores, incluso faltó a dos citas. ¿Increíble? Sí, pero real.
La no renovación de contrato de la AFA a José Pekerman, Hugo Tocalli y aquel brillante cuerpo técnico, inexplicable hasta hoy, derivó en malos resultados y actuaciones generadas también por mala elección de entrenadores y por una baja en el nivel de las camadas de futbolistas. En 2009 Sergio Batista, a la postre en la absoluta, fue quien dirigió un conjunto que en el Sudamericano de Venezuela ganó un solo partido en la fase de grupos, arañó su entrada a las finales y allí encadenó varias derrotas para faltar a la Copa por primera vez en 22 años. En 2011 Walter Perazzo fue el designado y pudo colocar al equipo en el torneo de Colombia, no en los Juegos Olímpicos donde se esperaba. Y ese plantel con poco talento, pero regularidad alcanzó la mejor tarea nacional desde 2007 a hoy, al ser batido por Portugal en cuartos de final por penales y recibir un solo gol en contra en cinco encuentros.
Otra ausencia, más humillante que la de 2009, fue para 2013 y en el país, cuando el once de Marcelo Trobbiani logró un solo triunfo y no superó la ronda inicial, donde de cinco se clasifican tres. Para 2015, en medio de una AFA sin rumbo tras la partida de Julio Grondona, fue su hijo Humberto quien consiguió el Sudamericano y así la vuelta al Mundial y a los Juegos, lo que fue en vano porque en Nueva Zelanda 2015 Argentina se quedó en la primera ronda. El 2017 fue el de otra serie de desatinos y una larguísima novela para desechar 44 proyectos y poner a dedo a Claudio Úbeda, que con poca experiencia tampoco pudo saltar la primera fase a pesar de golear a Guinea en Corea del Sur. Se buscó mejorar desde la raíz y se eligió a Fernando Batista, el hermano de Sergio, que venía teniendo suceso con la Sub 15 con un gran título ante Brasil en 2018 en San Juan. Argentina jugaba muy bien y casi se lleva el Sudamericano, pero entró a Polonia 2019 con reales esperanzas de limpiar su fea imagen. Parecía así tras buena primera ronda, pero en rarísimo partido malí le igualó agónicamente en octavos de final a dos goles y después lo dejó afuera por tiros desde el punto penal.
Ahora, en 2023, cuando no iba a presentarse por su fracaso en el regional de Colombia, el regalo de la FIFA de bajar a Indonesia de sede y las gestiones inteligentes de la AFA le dieron una nueva chance. Tres victorias sobre países menores como Uzbekistán, Guatemala y Nueva Zelanda presagiaban sin embargo un buen futuro en este torneo, con una mejor generación de elementos y un crecimiento de nivel. Y jugando su mejor partido quedó al margen con un mentiroso 0-2 ante Nigeria. El técnico Javier Mascherano, que no parecía el más apto para comandar este grupo, generó una imagen positiva y un grupo que a futuro merece ser aprovechado para recambio de la mayor campeona del mundo en Qatar.
El recambio propuesto por gente como Agustín Giay, Valentín Barco, Federico Redondo, Valentín Carboni, Luca Romero, el goleador Alejo Béliz, Brian Aguirre o Máximo Perrone llama a un sonriente mañana para la gloriosa albiceleste, de cara a la Copa América 2024 y sobre todo a las eliminatorias para el próximo Mundial 2026 en Estados Unidos, México y Canadá. No hará falta que Lionel Messi se presente con 39 años, tiene detrás de él a varios buenos. Eso sí, como a los argentinos nos gusta ganar, la serie de frustraciones es larga y aburrida. Como que hace 16 años no se es campeón y, al menos, hace 12 no se figura mínimo entre los ocho. Para seguir participando, y quizá (sería lo correcto) con el mismo cuerpo técnico.
LA MALA RACHA DEL SUB 20 DESDE 2007
AÑO, SEDE, RESULTADO, DT, FIGURAS
2009, Egipto, no se clasificó; Sergio Batista; Salvio, Andrés Velázquez, Jonathan Cristaldo, Andrés Ríos
2011, Colombia, eliminado en cuartos de final; Walter Perazzo; Andrada, Pezzella, Lamela, Iturbe, Alan Ruiz
2013, Turquía, no se clasificó; Marcelo Trobbiani; Magallán, Kranevitter, Centurión, Lanzini, Iturbe
2015, Nueva Zelanda, eliminado en primera ronda; Humberto Grondona; Batalla, Mamana, Ángel Correa, Giovanni Simeone, Pavón
2017, Corea del Sur, eliminado en primera ronda; Claudio Úbeda; Montiel, Foyth, Ascacíbar, Lisandro Martínez, Lautaro Martínez
2019, Polonia, eliminado en octavos de final; Fernando Batista; Nehuén Pérez, Facundo Medina, Ezequiel Barco, De la Vega, Maroni, Gaich, Julián Álvarez
2023, Argentina, eliminado en octavos de final; Javier Mascherano; Giay, Barco, Perrone, Redondo, Carboni, Béliz, Aguirre, Luca Romero
RESUMEN: Desde su último título en Canadá 2007, Argentina acumula dos ausencias (2009 y 2013), dos eliminaciones en primera ronda (2015 y 2017, dos seguidas en octavos de final (2019 y 2023) y una en cuartos, su mejor tarea desde ese 07, en 2011.
Fuente: Archivo Tribunero.com
Diego Martín Yamus.
diegoperiodista93@gmail.com