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El Mundial de Catar 2022 terminó este pasado domingo. Se desveló el misterio y uno de los candidatos finalmente no decepcionó, se trata de Argentina. Tras una final para el infarto los sudamericanos se sacaron chispas con los franceses en un partido que terminó con seis goles anotados y que debió ser dirimido por penales. Pero ¿fue la mejor final?
Obviamente los medios argentinos eufóricos por la victoria, fiel a su estilo, cuando les es favorable todo lo magnifican a un punto de necedad. Considerar a Diego Maradona mejor que Pelé, sin tener en cuenta que el brasileño ganó tres Mundiales, dos Libertadores, cuando el ‘Diez’ apenas se quedó con una Copa Mundial y brilló en un equipo chico italiano, obviamente que nada le quita mérito a «El Diego» porque cada uno dejó una marca imborrable en la historia del fútbol, además de enormes enseñanzas.
Pero, la historia la escribe el que ganó, solo que podría caer por tierra todo esto, las redes sociales y el fácil acceso a datos de archivo, incluyendo videos, da posiblidades de que cada uno saque sus conclusiones por sí mismo.
La cuestión es que la final jugada en Lusail tuvo cambios de emociones y un sinfín de quiebres; Argentina 2-0 arriba iba, cómodo, ante una Francia que parecía estar entregada. Faltaban diez minutos para el cierre y en un santiamén Kylian Mbappé se mandó un doblete para terminar 2-2 yendo a la prórroga. En esa etapa Argentina levanta a 3-2, dejando abierto el camino para el título, pero a falta de dos minutos otra vez Mbappé lo equilibró, obligando los penales.
Pero la primera final nomás, en 1930, Argentina se lo dio vuelta a Uruguay en pleno Montevideo a 2-1 en la primera etapa. Pablo Dorado en el minuto 14 había abierto para la Celeste, mientras que Carlos Peucelle en el minuto 20 y Guillermo Stabile en el 37, se encargaron de torcer la historia. En la complementaria el ‘Vasco’ José Cea volvió a equlibrar el anotador para darlo vuelta a favor de los locales Victoriano Santos Iriarte y Héctor Castro a los 68′ y 89′, respetivamente. Fue 4-2 para Uruguay.
En 1938 el anfitrión Francia no pudo llegar a la final. Les Bleus debieron mirar como Italia y Hungría luchaban por el título junto a sus compatriotas que pagaron su entrada para ver un festival de emociones. Iban apenas 8 minutos de juego y ya estaban 1-1; Gino Colaussi para Italia y Pál Titkos para los magiares habían anotado. Esa primera etapa terminó finalmente 3-1 para la ‘Azzurra’ porque Silvio Piola en el primer cuarto de hora y nuevamente Gino Colaussi no paraban de mandar pelotas a la red. La complementaria trajo más emociones luego que Gyorgy Sárosi descuente para los húngaros y antes que éstos reaccionen llegó el tanto de Silvio Piola, se segunda conquista, para cerrar 4-2.
El ‘Maracanazo’ de 1950 es y será la final más dramática de la historia, hecho que será muy difícil de igualar. Es que Brasil, organizador del Mundial, precisaba del empate ante Uruguay para consagrarse campeón ante 220.000 aficionados que colmaron el Maracaná al grito de ‘É campâo’. Los brasileños, para mayor tranquilidad, se pusieron arriba 1-0 porque Friaza hacía estallar de algarabía a la muchedumbre en el segundo minuto de la complementaria. La Celeste pudo igualar recién en el minuto 66 gracias a Juan Alberto Schiaffino. Ese gol no preocupaba porque Brasil era campeón lo mismo. Al grito de ‘Campeâo’ los locales bailaban en las tribunas. Once minutos restaban para ser campeones cuando Alcides Edgardo Ghiggia se la puso en un costado a Moacir Barbosa para dejar en segundos a ese casi cuarto de millón de aficionados totalmente en silencio, sin poder articular palabra. Uruguay lo ganó 2-1 y ganó la final.
En 1954 Suiza fue el organizador del Mundial. En esa ocasión se jugó el partido que acabó siendo llamado «El Milagro de Berna». La máquina demoledora del fútbol era nada menos que Hungría que venía de ganarle la semifinal al campeón defensor Uruguay en un emocionante 4-2 durante la prórroga, en el denominado ‘Partido del Siglo’. En ese encuentro un jugador charrúa había muerto en el campo de juego de un paro cardíaco, el cuerpo médico allí presente lo revivió y Juan Eduardo Hobberg siguió jugando el partido. En esa ocasión los magiares, además, se habían llevado puesto a Alemania Federal (RFA) por la fase de grupos por un histórico 8-3. Vale recordar que luego de la Segunda Guerra existieron dos Alemania. En la previa era imposible que la RFA pudiera ganarle a esas bestias; ocho minutos iban cuando los magiares ya estaban 2-0 porque Ferenc Puskas y Zlotan Czibor hacían deleitar a los 60 mil presentes en el Wankdorfstadion de la capital Berna, pero, en el minuto 10 Max Morlock descontaba y en el minuto 18 Helmut Rahn ponía el 2-2. El partido iba camino al alargue pero justo a tiempo, nuevamente, Rahn la mandaba al fondo de las piolas y el encuentro acabó 3-2. Alemania Federal sumó su primer trofeo.
En 1986 los argentinos dejaron una huella al ganar una memorable final en México. El rival era Alemania Federal. La puja jugada en el Azteca ante 115 mil aficionados, al mediodía y con un calor de infierno, el conjunto dirigido por Carlos Salvador Bilardo iba 2-0 hasta el minuto 56 porque José ‘Tata’ Brown y Jorge Valdano dejaban liquidado el pleito. ¿Liquidado? Perdón, error, la RFA descontaba a falta de 16 minutos para el final por medio del impresionante Karl-Heinz Rummenigge y faltando nueve minutos vino la conquista de ‘Rudi Fela’ (Rudi Völler). Argentina no tenía resto, según contó años después Diego Maradona, para poder encarar un alargue con ese calor abrasador, entonces, apareció en el minuto 84 Jorge Burruchaga para dejar todo 3-2. Segundo título para los Albicelestes.
Hasta 2022 hubo finales que terminaron el resultados abultados Brasil 5-2 Suecia en 1958; Brasil 4-1 Italia en 1970; Inglaterra 4-2 Alemania Federal en 1966; Francia 4-2 Croacia en 2018 y un espantoso 0-0 entre Brasil e Italia por el Mundial de Estados Unidos 1994 donde los verdeamarelos ganaron por penales.
