São Paulo, Brasil – El Corinthians ha logrado regularizar los salarios atrasados de sus jugadores y empleados, cumpliendo con los pagos apenas un día después de su vencimiento. Esta crucial inyección de liquidez fue posible gracias a la venta del lateral-izquierdo Carlos Augusto al Monza de Italia.
La operación por el 40% de los derechos del jugador se cerró en R$ 25 millones (aproximadamente 4.7 millones de dólares), recursos que fueron directamente destinados a sanear las deudas salariales pendientes.
La situación financiera del club había generado tensión y preocupación entre la plantilla debido a los persistentes retrasos en los pagos. Sin embargo, la oportuna transferencia de Carlos Augusto ha brindado el alivio necesario para que el «Timão» cumpla con sus obligaciones.
Este pago a tiempo representa un paso positivo hacia la estabilidad financiera del Corinthians y es fundamental para la moral y la satisfacción de su personal y jugadores.