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Todo Brasil está en pánico. El motor del equipo Neymar salió con el tobillo hecho un bofe. Iban 79 minutos de juego cuando Tite lo sacó del campo de juego porque el atacante se quejaba de un dolor insoportable.
El hecho es que Neymar cobró de lo lindo ante los recios defensores serbios, en partido válido por la apertura del Grupo H del Mundial de Qatar. Una hora después del encuentro el médico de los brasileños, Ramiro Lasmar, explicó que «Ney» tiene un esguince y que deberán esperar 48 para ver cómo evoluciona.
Gran temor reina en filas del scretch porque se perdería el partido con Suiza del próximo lunes, pero, el peor de los miedos es que se pierda la Copa del Mundo.
«Neymar sufrió un esguince de tobillo derecho. Tenía un poco de hinchazón», comenzaba su relato. «Empezamos el tratamiento con hielo en el banco y ahora ha seguido el tratamiento de fisioterapia. No hay examen de imagen programado. Si hay necesidad, lo heremos, enfatizó el galeno.
Además Tite, en rueda de prensa auguró estar «seguro de que Neymar jugará en el Mundial», respeto a los partidos restantes de la Canarinha que, seguramente, clasifique y llego muy lejos.
