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Jugaban por el regional que da pasajes para el Federal. Peñarol de San Juan había goleado en casa y con el empate en San Luis ante Sporting Victoria estaba hecho. Sin embargo, el partido no terminó ya que hinchas locales invadieron la cancha y agredieron salvajemente a los sanjuaninos.
Absurdo clima de guerra hubo en San Luis. Sporting Victoria había perdido feo por semifinales con el «Bohemio» en San Juan y debía revertir el 4-0 en casa.
La impotencia de los seguidores arrancó desde que Peñarol llegó a la ciudad. Bombas de estruendo primero y luego ataque a pedradas al ómnibus.
Finalmente al entrar Peñarol comenzó la lluvia de objetos a la cancha. El referí expulsó a Walter Quevedo, hombre de Sporting Victoria antes de la media hora, y estalló parte de la batahola.
El árbitro paró el partido hasta que la afición local se calme. Luego el encuentro siguió y el local no lograba, siquiera, marcar un gol.
En el minuto 73 se desató la batahola porque los desubicados seguidores saltaron en masa el alambrado y partieron para la violencia.
Futbolistas del Bohemio con diversas heridas. «Pudo haber sido una tragedia», indicó Cristian Bove, técnico de los «Peña» al diario Tiempo de San Juan. Mientras que Mariano Perona, directivo, denunció que «no nos protegió la Policía», y que el club local miró para otro lado mientras los agredían.
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