Nottingham, Inglaterra – En un inesperado giro, la selección inglesa de fútbol cayó 3-1 ante Senegal en un amistoso internacional disputado en el City Ground de Nottingham. Esta derrota marca la primera vez en 22 partidos que Inglaterra pierde contra un equipo africano, generando preocupación y críticas entre la afición.
El encuentro comenzó con un prometedor gol de Harry Kane para los ingleses, quienes parecían tomar la iniciativa. Sin embargo, Senegal rápidamente tomó el control del partido, con goles de Ismaïla Sarr, Habib Diarra y Cheikh Sabaly, demostrando una superioridad notable en el campo. Un gol de empate de Jude Bellingham fue anulado tras una revisión, debido a una mano previa de Levi Colwill.
A pesar del resultado adverso, el entrenador Thomas Tuchel buscó minimizar la derrota, calificándola como una «oportunidad de aprendizaje» y enfatizando que aún hay tiempo para realizar mejoras significativas antes del Mundial de 2026. No obstante, la afición presente en el estadio no compartió el optimismo del técnico, despidiendo al equipo con abucheos al final del partido, reflejo de la frustración por el rendimiento mostrado.
La derrota ante Senegal ha provocado una ola de críticas en las redes sociales, con aficionados cuestionando la dirección del equipo y el desempeño de jugadores clave. Este resultado subraya la necesidad urgente de ajustes tácticos y una mayor cohesión dentro del equipo inglés de cara a sus próximos compromisos internacionales.