(Télam).- Este viernes 21 de octubre se cumplieron 15 años del debut en la primera división de Boca de Carlos Tévez , actual ídolo del club y quien por entonces tenía 17 años. Fue de la mano de Carlos Bianchi , el entrenador más exitoso de la historia de la institución que confió en sus condiciones y lo mandó a la cancha en un partido en Córdoba, ante Talleres (derrota por 1-0).
Era un Boca que venía de consagrarse campeón en las Copas Libertadores de 2000 y 2001 y que se preparaba para disputar la Copa Intercontinental ante Bayern Munich en Japón. Aquel Apertura 2001 fue ganado por Racing y los xeneizes no redondearon una buena campaña.
El único gol de aquel partido lo anotó el zaguero Julián Maidana, pero eso es una anécdota, ya que lo importante era el debut de Tévez, llevado al club por Ramón Maddoni y de quien ya se hablaban maravillas por sus actuaciones en las divisiones inferiores y en los seleccionados juveniles argentinos.
En ese partido, por la 10ª fecha, Bianchi cumplió con el sueño de un pibe de 17 años, nacido en Fuerte Apache. Ese día, Tévez debutó con la camiseta número 18 y al igual que todo el equipo, no tuvo un buen partido y fue reemplazado en el segundo tiempo por Ariel Carreño.
Boca formó con Oscar Córdoba; José María «Pampa» Calvo, Rolando Schiavi, Nicolás Burdisso y Clemente Rodríguez; Cristian Traverso, Mauricio «Chicho» Serna, Walter «Chueco» Gaitán y Juan Román Riquelme; Tévez y Marcelo «Chelo» Delgado.
Ese entusiasta Tévez se había iniciado en el baby-fútbol de All Boys, a donde fue llevado por Norberto Propato, un descubridor de cracks que recorría potreros. En esa época jugaba con el apellido materno Martínez. Al mismo tiempo que en el baby de All Boys, Carlitos jugaba en Santa Clara, un club del barrio que se había fundado junto a una iglesia. Con ese equipo una vez le ganó 6-4 al poderoso Club Parque, por donde pasaron, entre otros, Fernando Redondo, Esteban Cambiasso, Fernando Gago, y que dirigía Ramón Maddoni.
Más tarde, cuando Mauricio Macri llegó a Boca, con un convenio, el club Parque pasó a depender del club de la Ribera y Maddoni, que se integró a las inferiores, recomendó fichar al jugador que fue inscripto con el apellido Tévez, de su tío.
En las inferiores estuvo bajo las órdenes de otro descubridor de talentos: Bernardo Griffa, que alguna vez lo destacó por «su técnica y su agresividad». Cuando estaba en séptima división, Bianchi lo llevó a entrenar con la Primera. Luego de dar las últimas indicaciones antes del partido contra Talleres, el Virrey vio en el vestuario a Carlitos, tímido y aún suplente, y le soltó: «Mirá que el domingo que viene jugás vos».
Luego el entrenador dejaría su cargo al uruguayo Oscar Tabárez, quien consolidó a Tévez durante 2002. Un año más tarde retornaría Bianchi, con quien Carlitos alcanzó su apogeo con las conquistas de la Copa Libertadores 2003 (finales ante Santos), el Apertura 2003 y la Copa Intercontinental.
En Boca totalizó 110 partidos jugados, convirtió 38 goles y ganó 4 títulos en esa primera etapa.
Para el 2004 llegó su vinculación con el iraní Kia Joobrachian y su venta al Corinthians de Brasil en 15 millones de euros. Volvió a Boca el año último tras un exitoso paso por Europa.
Diego Martín Yamus.
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