Será una noche histórica la del próximo jueves 23 de marzo. Porque ellos, los héroes del desierto, estarán de cara a su gente. La Argentina tricampeona del mundo en Qatar 2022 estrenará su gloria en un mediocre amistoso ante Panamá. Y uno de esos héroes, el héroe, será Lionel Messi.
El sinónimo de este tiempo albiceleste pisará junto a sus glorificados compañeros el estadio Monumental de Buenos Aires, en el primero de los dos compromisos de la ventana FIFA, e intentará hacer de las suyas. Como aquella noche de la Copa América Centenario 2016, cuando aún sin ser titular fue la figura del 5-0 ante los panameños, con una actuación inolvidable.
Aquel invierno argentino la Selección llegó a Estados Unidos con sed de revancha, en esta primera edición especial del longevo torneo por los 100 años de la CONMEBOL. Es que menos de un año atrás había perdido en 2015 la final con el Chile de Jorge Sampaoli. Ese 10 de junio de 2016, luego de haber debutado exitosamente justo ante la roja de Juan Pizzi, enfrentaba al once centroamericano, de buenos números entonces pero lejos de los mejores.
Messi arrastraba un problema lumbar y no había estado contra los chilenos, y para este segundo encuentro el técnico Gerardo Martino lo dejó en el banco. El gol de Nicolás Otamendi, uno de los campeones del mundo, a los siete minutos dio la apertura a la nacional. Pero había que cerrar el resultado, y Martino dispuso el debut de Messi a los 61 en lugar de Augusto Fernández.
En una ráfaga de talento y eficacia, la “Pulga” fue tan imparable que, aún con su lío físico, marcó un triplete a los 68, 78 y 86 minutos. Sí, apenas siete después de su ingreso, hizo de golpe tres goles. El primero tras un mal despeje de la defensa que rebotó y le quedó para buena definición. Luego el 10 del Barcelona clavó un exquisito tiro libre, y, por último, definió a pase de Marcos Rojo para su tercero y el cuarto, antes de que Sergio Agüero decorara a los 89.
Fue una de esas noches tardías de Estados Unidos donde Messi alcanzó un rendimiento altísimo, cosa que no era corriente ni mucho menos entonces. El astro y sus compañeros siguieron firmes hasta que Chile fue el verdugo inesperado de un equipo brillante y lo volvió a derrotar. Pero esa vez con Panamá Messi fue la diferencia, aunque fuera como sustituto. Como quizá lo sea en el partido del jueves.
Diego Martín Yamus.
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