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Es raro que una selección argentina enfrente a Guatemala. Salvo que figuras tan grandes como Carlos Bilardo y Lionel Messi estén. Eso fue lo que sucedió con la Pulga en el 4-0 de 2013, cuando le hizo al once chapín un triplete. Y eso, también, fue lo que sucedió en 1990 con el técnico entonces campeón mundial, cuando un pequeñísimo combinado guatemalteco se atrevió a empatarle.
Era el 14 de enero de 1990 en el estadio Mateo Flores de la capital centroamericana. La Selección ya sabía contra qué rivales defendería su títúlo de México 86 en el Mundial de Italia. Esos días, sin Diego Armando Maradona en el plantel, realizó una gira como preparación para la gran cita italiana, que comenzó el 10 de enero y que, como casi todos los amistosos de ese año, no salió bien: dos derrotas, un empate y ningún gol a favor. Primero perdió con el Mónaco de Ramón Díaz 2 a 0, en la ciudad monegasca. Y luego, llegó a enfrentar a un conglomerado de Guatemala, que no era el titular. Los chapines venían de ser eliminados de Italia 90 en el pentagonal final de la CONCACAF, cuando la suspensión de México había abierto las puertas para la clasificación. Sin embargo, los locales le hicieron partido a la albiceleste y le igualaron sin goles. La gira se cerraría tres días más tarde en el Memorial Coliseum de Los Angeles, con caída 0-2 ante México.
Esa poco recordada noche, Argentina formó con Falcioni; Simón, Monzón, Fabbri, Olarticoechea; José Basualdo (Airez 45′), Batista, Giusti,Gorosito; Valdano y Alfaro Moreno (Simeone 46′). Esa poco recordada noche, un tal Guatemala se golpeó el pecho de haberle empatado al equipo de Maradona y Bilardo. Sí, el mismo que seis meses después fue subcampeón del mundo.
Diego Martín Yamus.
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