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Eran otros tiempos los del fútbol argentino en la dorada década del 80. Tiempos de esplendor, de estadios llenos, de grandes jugadores, de Campeonato Nacional y Metropolitano muy disfrutables. Y eso sí, no eran tiempos de Internet ni whatsapp ni ultratecnología. Pero en los diarios o en la legendaria revista El Gráfico seguro salió bien replicado. El modestísimo Altos Hornos Zapla, de la provincia de Jujuy, en el corazón del Norte, se atrevió a vencer dos veces a Boca Juniors en el marco de los Nacionales.
Es cierto que también eran otros tiempos para ambos. Zapla, representante de la localidad de Palpalá, de gran importancia en la siderurgia (de allí su nombre) era protagonista sin suceso pero con continuidad de aquellos torneos que chocaban a los grandes con los pequeños pero entusiastas del interior. Al revés, Boca atravesaba una debacle futbolística reflejo de la institucional, con graves problemas financieros aún a un año de la venta de Diego Maradona al Barcelona. Y el destino quiso que boquenses y jujeños se vieran la cara cinco veces, dos en 1983 y tres en 1985, y que Zapla ganara dos, una en cada uno.
El Nacional 83 había empezado bien para ambos, clasificándose en sus respectivos grupos para la segunda fase. Allí se encontraron en el Grupo E, que también integraba Racing Club. Todo arrancó bien para Boca, que por la fecha 1 el 17 de abril goleó 4 a 0 en la Bombonera por Jorge «Gallegol» Vázquez, Jorge «el Potro» Domínguez y dos de Ricardo Gareca, uno de penal. Pero en la última, el 8 de mayo, Altos dio el golpe al ganar 2 a 0 en el Centro Siderúrgico, con tantos de Enrique Borneman y Roberto Mouzo en contra. Una hazaña para el del Norte, que esa histórica tarde formó con Quinteros; Anachuri, Giachello, Otaola, Tejeda; Bacas, Balbuena, Borneman; Zingariello, Ansonaud (Croce 58′) y Bulacio, con la dirección técnica de Juan Carlos Murúa. Un gustazo que igual no le sirvió para avanzar mucho, ya que luego sería eliminado por Talleres de Córdoba. En cambio, el xeneize (dirigido por Carmelo Faraone) continuó hasta los octavos de final, dejando afuera a San Martín (Tucumán) pero cayendo con Argentinos Juniors en tiempo suplementario.
Dos años después, en 1985, se volvían a ver pero desde la primera fase, en el Grupo B. Y otra vez el conjunto jujeño sacudió a su entonces debilitado gran rival. Esa primera fecha, el 17 de febrero, lo venció en Palpalá 1 a 0, con gol de Bacas a los 64 minutos. Y le complicó el camino al Boca de Alfredo Di Stéfano, que luego se enderezó y en la última, el 17 de marzo, de local en la cancha de Huracán, se tomó revancha y le ganó 2 a 1. Eso sí, para lograr el triunfo y el pase a la ronda de ganadores debió correr más de la cuenta, ya que empezó abajo a los 7′ por Vacaflor. Un minuto más tarde igualó el inolvidable José Luis «Tata» Brown, y recién a los 65 Alfredo Graciani le dio la victoria.
Pero hubo un partido más para el curioso historial. Boca cayó en la ronda Ganadores con Vélez Sarsfield (3-2 y 0-2) y como Zapla dejó atrás en la de perdedores a Argentino de Firmat (Santa Fe) se encontraron allí por quinta vez y tercera en un mes y días. Fue el 31 de marzo de nuevo en Huracán, y ahora Boca no dejó dudas con un 3-1 tras ir 3-0, con goles de Julio Olarticoechea, Alfredo Graciani y el juvenil Claudio Dykstra, descontando Borneman. De esa forma el azul y oro se sacó un inesperado clásico y regresó a la carrera, de la que Independiente lo marginó al fin de semana siguiente.
Así se cerró la vida de Altos Hornos Zapla en ese certamen y hasta hoy, ya que nunca más intervino en un torneo de la AFA, aunque sí en el Federal A o el Regional amateur, de donde este 2022 fue eliminado. Sin embargo, los fervorosos hinchas del siderúrgico nunca se olvidan de que un día le ganaron al poderoso Boca y fueron grandes. Más que un día, dos días.
Fuente: historiadeboca.com.ar y RSSSF
Diego Martín Yamus
diegoanita@hotmail.com.ar
