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Que cierta parte de la prensa comunica de forma al menos revisable, no es novedad. Es lamentable que ante la suspensión del decisivo Gimnasia-Boca por la Superliga, este domingo por lluvia, algunos periodistas escriban o hablen más en cómo quedó parado Boca con el tema que en la vida, la salud de los seres humanos, la tremenda situación climática.
Se desgañitan opinando que el partido en La Plata debió jugarse, que Boca salió ganando por la postergación por su difícil actualidad deportiva, por su agitada agenda internacional. Eso para ellos es lo más importante. No tuvieron en cuenta, o prefirieron minimizar, que llueve torrencialmente desde casi 48 horas, que hay actividad eléctrica, que una cancha con agua (como declaró el árbitro Facundo Tello) es peligrosa para un partido tan importante, encima con la locura con la que se juega en el fútbol actual. Verdaderamente penoso, porque el enfoque le llega al hincha y éste lo toma y lo hace suyo, todo equivocadamente. Primero el fútbol, después vemos la salud de los jugadores, eso es lo que nos comunican. Lamentable. Los jugadores, antes que eso, son seres humanos que merecen bienestar.
Diego Martín Yamus.
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