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Dinamo Bucarest, el otro grande del fútbol rumano, pasó vergüenza la noche del viernes al caer ante el CFR Cluj, que le jugó 58′ con 10 jugadores. El dueño de la conseción Ionut Negoitá explotó contra los jugadores y en tono amenazante les dijo «Indolentes, superficiales e irrespetuosos», tras cosechar una fea derrota que los aleja del puntero Astra Giurgiu.
Dinamo Bucarest pasó vergüenza en esta jornada 14 de la Liga 1, al caer por 1-0 de visitante ante el Cluj, que quedó con 10 a los 32′, luego que el zaguero Ionut Rada vea la roja.
Los militares cosecharon su quinta derrota en el campeonato y esto despertó, no solo la ira de su hinchada, sino la del dueño de la concesión «Roja y Blanca» que administra al segundo equipo más popular de Rumania; el multimillonario Ionut Sorin Negoitá no soportó su ira y explotó con todo contra sus jugadores, y tampoco perdonó al entrenador Flavius Stoican «Hay dos o tres jugadores que se salvan, pero hay muchos que están mal entrenados»; «voy a replantear la próxima etapa del campeonato, hay que traer algún jugador de jerarquía»; «hay jugadores Indolentes, superficiales e irrespetuosos».
Lleno de ira el pope de los Perros Rojos, proseguía «¡No los soporto! esto tiene que terminar, no inspiran confianza alguna».
El hecho es que el Dinamo está muy atrás en el campeonato, que hasta ahora es liderado por Astra Giurgiu, pero podría ser ampliamente dominado por sus eternos rivales, Steaua Bucarest, que tiene dos partidos menos.
@lostribuneros
