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Las heridas estaban abiertas por el conflicto bélico entre Argentina y Gran Bretaña por las Islas Malvinas. El equipo albiceleste enfrentaba a Inglaterra por el Mundial de México y Diego Maradona pasaría a la inmortalidad por cómo llevó a la victoria a su equipo.
FPT. Pasaron 29 años pero parece que fuera hoy. Se enfrentaban en el monstruoso estadio Azteca por los octavos del Mundial ’86, Argentina e Inglaterra. Con tanta historia en la espalda que éste no podía ser un partido más.
Un primer tiempo muy trabado y plagado de nerviosismo en el que la Selección fue dominante, pero poco incisiva. Con Diego y Burru muy metidos en sus funciones, Valdano era el jugador que necesitaba engranar con el equipo. Aislado de las jugadas e impreciso a la hora de “tocar y buscar”, Jorge redondeó una opaca primera mitad.
Los ingleses, abroquelados y confiados en su muy buena defensa tenían a Gary Lineker (quien terminó siendo el goleador de esa Copa con 6 tantos), parado casi en medio campo, con nula participación. Asi, se fueron al descanso.
Con la misma intensidad, Argentina salió a jugar el complemento.Pasaron 6 minutos de la parte final y el Diez comienza sobre la izquierda una apilada que lleva consigo a tres defensores “blancos”, intenta una pared con el 9 ,Valdano, que nuevamente es anticipado, pero sin embargo, el fin fue el buscado… El central termina rechazando en contra de su arco y deja la pelota dividida en las alturas entre Shilton y Maradona. El argentino utilizó el único recurso “a mano” disponible y la mandó a guardar.
Fuente: Fútbol Para Todos.
@lostribuneros
