Racing exorcisó al mismísimo ‘Diablo’

La Academia le puso un broche de oro al verano en Mar del Plata al derrotar por 3-1 a Independiente, aprovechando groseros errores de la defensa. Ricardo Noir, Lautaro y Roger Martínez anotaron para el vencedor. Juan M. Lucero descontó para el derrotado. La copa «Ciudad de Avellaneda» es de Racing.

En otra noche para el olvido del arquero Diego «Ruso» Rodríguez, y con una defensa mal parada, Independiente hizo agua ante su rival de todas las horas: Racing.

El denominado «Clásico de Avellaneda» tuvo contraste; Independiente puso en la cancha a sus mejor oncena, mientras que Racing, por el contrario, se nutrió de suplentes, pensando que en breve debuta por Copa Libertadores ante el Puebla mexicano.

Martín Benítez, Juan Martín Lucero y el «Cebolla» Christian Rodríguez, comenzaron apedreándole el «rancho» a Sebastián Saja, uno de los pocos titulares.

Independiente la tenía clara, sin embargo, un cambio radical tuvo en su andamiaje luego que el «Torito» Diego Rodríguez cometa una dura falta sobre Mariano Bareiro a los 22′, hecho que obligó a Federico Beligoy a exhibir la tarjeta roja.

La ventaja numérica favoreció a un Racing que aprovechó cada centímetro del campo y a fuerza de velocidad y de un muy buen aprovechamiento de la pelota quieta, comenzó a hacer de las suyas.

El equipo de Sava tuvo como figura al joven guaraní Óscar Romero, hombre que le sirvió un balón al uruguayo Washington Camacho, quien intentó fusilar a un ruso Rodríguez, que andaba con todas las pilas, logrando reprimirles el grito de gol.

La sociedad conformada por el habilidoso Benítez, junto al talentoso y experimentado jugador uruguayo el «Cebolla» Rodríguez, enloquecieron a la bisoña defensa racinguista, aunque no lograban romper el cero.

Finalmente, la paridad se acabó gracias al notable futbolista paraguayo Óscar Romero que, con gran visión del juego, se las ingenió para romper una defensa en línea, tirar una pelota profunda para que el «Tito» Noir, ponga el 1-0.  Esto ya era en el complemento.

Herido en su amor propio, para peor, con titulares, el Rojo, con diez hombres en la cancha, fue por el empate y lo logró; Juan Martín Lucero sacó un potente cabezazo que dejó sin asunto al «Chino» Saja.

El empaté pudo haber preocupado al público celeste y blanco, pero no al paraguayo Romero, hombre que ya tenía la fórmula en mano. El habilidoso jugador se encargó, nuevamente, de romper esa defensa mal parada y, una vez más, le sirvió un balón a un compañero, en este caso al juvenil Lautaro Martínez para volver a estar arriba en el marcador.

Esta vez, antes que el ‘Rojo’ pueda reaccionar, apenas dos minutos después del 2-1, el colombiano Roger Martínez, aprovechando el descubrimiento de Romero, cortó esa defensa parada en línea, entró a todo vapor por la derecha, vio a un «Ruso» Rodríguez muy mal parado y se la puso en el primer palo: 3-1. 

Racing, tuvo 11′ más para poder hacer un mayor desastre con un desconcertado Independiente, sin embargo, la juventud de sus jugadores impidió una debacle, debido a que cometieron errores en el frente cuando el juego estaba liquidado.

El «Colorado» Sava sella el verano con un trofeo y ahora pasa de hoja para la Copa Libertadores y el torneo corto que se avecina.

@lostribuneros

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